Blog
¿No tienes tiempo para cocinar? ¡Aprende a optimizar tus menús!

¿No tienes tiempo para cocinar? ¡Aprende a optimizar tus menús!

Nomen      23/05/2016

Según un estudio realizado por Jesús Contreras (Catedrático de Antropología Social de la Universidad de Barcelona), los españoles hemos reducido en los últimos años en tres horas semanales el tiempo que dedicamos a cocinar. Los cambios sociales, la falta de tiempo y, en algunos casos, la poca práctica en la elaboración de platos tradicionales de la dieta mediterránea hacen que nuestros hábitos alimentarios no sean del todo correctos.

La cuestión es: ¿cocinar rápido es sinónimo de comer mal? La verdad es que, si cumplimos con los requisitos de la dieta saludable, es decir, si conseguimos que nuestra alimentación sea equilibrada, variada y suficiente, ¡no tiene por qué! Además, actualmente la industria alimentaria nos lo pone fácil, proporcionándonos productos fáciles de conservar y, sobre todo de manipular. Por ejemplo, los nuevos Vasitos de Arroz Nomen, con los que en tan solo un minuto al microondas podrás obtener un plato de arroz de la variedad integral, basmati o redondo  con toda la calidad Nomen.  Si a este plato le añadimos un poco de lechuga, tomate, palmitos, piña y una lata de atún, tendremos una deliciosa ensalada completa, lista para degustar como plato único.

Comer bien, no tiene por qué ser sinónimo de estar largas horas en la cocina, simplemente es cuestión de organización a la hora de planificar las comidas de la semana y, sobre todo, constancia en realizar la compra para evitar así la improvisación, una de las principales causas de que terminemos comiendo cualquier cosa.

Lo más importante es tener en cuenta lo que ya hemos ido explicando en anteriores artículos, tener presente que para que una comida o cena sea equilibrada deberá incluir:

– La dosis justa de proteínas (marcadas en rojo).

– Una ración de verduras y/o hortalizas  (marcadas en verde) porque son bajas en calorías, ricas en vitaminas, minerales y fibra, y  aligeran mucho las comidas.

– Asegurar un buen contenido vitamínico incorporando algún vegetal o fruta (marcada en azul) en crudo en cada comida.

– Incorporar hidratos de carbono (marcado en naranja) para garantizar el aporte energético del plato.

A partir de aquí iremos variando cada grupo, para enriquecer al máximo nuestras comidas y evitar así cualquier carencia nutricional. Por ejemplo, dentro de los hidratos de carbono iremos variando a lo largo de la semana con arroz, pasta, pan, patatas, legumbres. Dentro del grupo proteico priorizaremos la carne magra y el pescado blanco por encima de las carnes rojas y embutidos que, cómo máximo, estará presente una o dos veces a la semana.

Aquí debajo os dejamos una tabla en la que, de forma genérica, tenéis un menú que os servirá de patrón en la organización de vuestras comidas.

optimizar_menu-01XCAST
Y a partir de aquí solo nos hace falta un poco de imaginación. Por ejemplo:

optimizar_menu-02XCAST

Ya veis que comer rápido no es sinónimo de comer  mal, lo único que necesitas es:

Tener una buena despensa con todos los productos esenciales para preparar los menús diarios. Los vasitos de arroz Nomen, las legumbres de bote, la pasta o las conservas de pescado son un ejemplo.

Planificar el menú semanal, lo que te permitirá organizar mejor tu tiempo a la hora de realizar la compra y de cocinar, y, sobre todo, evitará que caigas en la improvisación de terminar comiendo cualquier cosa.

Utilizar electrodomésticos que te ayuden a cocinar en poco tiempo: estuches para cocinar al vapor, ollas rápidas, robots de cocina…

¡Ya veréis que si ponéis en práctica todas estas estrategias ahorrareis tiempo sin renunciar al placer de cuidaros!

¡Compártelo!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *